tag:blogger.com,1999:blog-4103548945744612218.post9192009221975168086..comments2023-09-01T22:07:28.898+02:00Comments on Todos los libros un libro: Alberto San Segundohttp://www.blogger.com/profile/11817371819436421241noreply@blogger.comBlogger1125tag:blogger.com,1999:blog-4103548945744612218.post-34088228498912523472011-02-09T20:48:52.401+01:002011-02-09T20:48:52.401+01:00Mi primer contacto con el señor Zweig lo tuve a lo...Mi primer contacto con el señor Zweig lo tuve a los 12 años con la biografía de Maria Antonieta que me leí de una sentada. Me han regalado la semana pasada 'La impaciencia del corazón' y el que reseñas lo leí en un ratito hace tiempo. Recuerdo algunas de las escenas (no lo tengo aquí). Me acuerdo de la relación, que encontraba la protagonista y que explicaba a su amado, entre la fugacidad en la visión que tenía para un hombre el rostro de una mujer y la imagen que se refleja en un espejo. Todas las caras al final serían caras difusas. No serían ninguna cara. Caras sin importancia. Lo que también recuerdo es el final. Sombras, sólo sombras. El escritor, a mi juicio y analizando lo que recuerdo del relato, era un tipo de los que no tienen conciencia de lo que sucede en su derredor. Se acoplaba a la realidad según le iba llegando. Él giraba el tornillo de esa realidad a conveniencia. Lo que yo denomino un psicópata de los sentimientos porque su <i>modus operandi</i> es similar al de un psicópata social. Alguien encantador, con reconocimiento, el perfecto vecino, pero sin ningún vestigio de culpabilidad. ¿Otra criatura rapaz nocturna?... quizá. Sin ser Hemingway ni Sherezade (aquí no toca) me podría imaginar un diálogo entre los personajes masculino y femenino del fondo del cuadro (sin salida) de Hopper que has dicho que usarías en Leones la próxima semana. Podrían ser perfectamente el escritor y la desconocida. Ah, el camarero indiscutiblemente una figura que pasa de soslayo pero que seguro que tendría mucho que contar: el mayordomo (no recuerdo el nombre).<br /><br />De todas formas, creo que a Zweig se lo rifarían ahora mismo como guionista de culebrones en Venezuela. Me resulta un poco ñoño. No sé si 'me podrá' el libro que me han regalado. Probablemente lo abandone por "Tantas maneras de empezar" que ya me está esperando.<br />En fin, que amablemente me has invitado a regresar a comentarte (no sabes lo que has hecho...) y yo soy incapaz de sintetizar. Lo de 'menos es más' no va conmigo. Perdón.Anonymousnoreply@blogger.com